Tú tienes el control
Debes tener en cuenta que las redes sociales son como un espacio alquilado, lo usas pero no es tuyo, no estableces las reglas, no puedes hacer muchos cambios y te lo pueden quitar en cualquier momento. Al contrario, si tienes tu propio sitio web tú estableces tus reglas, eres tú quien decide cómo administrarlo y el tipo de contenido que quieres compartir, y te permite crear la imagen que quieres que tus potenciales clientes perciban de ti.
Aporta credibilidad a tu marca o negocio
Tener un buen manejo de redes sociales es genial, pero tener tu propio sitio web permite que tus clientes y clientes potenciales puedan obtener una imagen completa de tu marca. Cuando alguien visita tu sitio web, puede revisar cada detalle que le permitas conocer, y esto realmente puede diferenciar los servicios que ofreces de la competencia.